El ex entrenador juvenil Bob Higgins ha sido condenado a 24 años de prisión por un tribunal de Winchester en el escándalo de abusos en el fútbol inglés.
El veredicto decía que Higgins era un «hacedor de reyes» que abusaba de su posición de poder sobre las futuras carreras de los jóvenes jugadores para utilizarlas para sus propias necesidades sexuales. «Algunos de los chicos te idolatraban e hicieron todo lo que pudieron para hacer realidad sus sueños de convertirse en futbolistas profesionales», declaró el juez Peter Crabtree.
Higgins fue objeto de una investigación policial después de que en 2016 se hicieran públicas las revelaciones sobre abuso sexual de jóvenes futbolistas en clubes de todo el Reino Unido.
El año pasado, los ex entrenadores juveniles George Ormond y Barry Bennell ya habían sido condenados a largas penas de prisión.